La selección adecuada de los ejercicios es una parte importante en el diseño de un programa de entrenamiento de fuerza e implica en muchas ocasiones hacer coincidir las demandas del ejercicio con las necesidades específicas del individuo.
Esto requiere un conocimiento profundo de las demandas mecánicas que el ejercicio impone al sistema musculoesquelético.
En general, los ejercicios unilaterales se integran en los programas de entrenamiento de fuerza, tanto para la rehabilitación, el rendimiento deportivo y para la prevención de lesiones.
Estos ejercicios incluyen acciones multiarticulares, con grupos musculares grandes que ayudan a mejorar la fuerza, la estabilidad y el equilibrio de la parte inferior del cuerpo.
En comparación con los ejercicios bilaterales, como las sentadillas y el peso muerto, los ejercicios unilaterales pueden considerarse más funcionales para las actividades diarias y más específicos del deporte.
Además, se puede lograr una actividad muscular similar y efectos de entrenamiento, con una menor carga externa. Esto tiene implicaciones importantes para las personas con dolor lumbar porque la carga espinal puede reducirse sustancialmente, sin comprometer los estímulos de entrenamiento de las extremidades inferiores.
Por otra parte, la elección de ejercicios con altas relaciones de activación isquiosural y cuádriceps puede evitar desequilibrios de fuerza y, por lo tanto, lesiones.
Además, la especificidad deportiva puede aumentar al seleccionar ejercicios en los que se proporciona una coactivación elevada de los músculos isquiosurales, ya que muchas tareas deportivas, como los saltos y los cambios de dirección, requieren una importante coactivación de la musculatura isquiosural.
Por lo tanto, en el siguiente VIDEOpaper aprenderemos la actividad muscular de tres ejercicios (sentadillas a una pierna) usando la misma carga relativa.