Entre el 70-85% de las personas han tenido dolor de espalda en algún momento de sus vidas.
El dolor lumbar crónico se define como dolor lumbar que dura más de 7-12 semanas.
El dolor lumbar crónico es una de las causas más comunes de incapacidad a largo plazo, causando dolor, limitando el movimiento, restringiendo la participación en la actividad física, con grandes repercusiones laborales y haciendo uso de grandes recursos sanitarios.
La gestión del dolor lumbar crónico consiste en una gama amplia de estrategias de intervención, incluyendo fisioterapia, terapia ocupacional, cirugía y tratamiento farmacológico.
Un enfoque conservador es generalmente recomendado para tratar el dolor lumbar crónico. La educación de los pacientes, los ejercicios específicos y la manipulación espinal se afirma que son eficaces a corto plazo, pero la magnitud de la mejoría funcional y el alivio del dolor es generalmente baja. Cuando se combinan ejercicios de estabilización del tronco, ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento muscular general, se asocian con los mejores resultados en términos de reducción del dolor y recuperación de la función.
La fisioterapia y las diferentes formas de ejercicio físico suelen ser las primeras opciones. Sveinsdottir y cols. encontraron que los tratamientos médicos conservadores e intervencionistas son beneficiosos para el dolor lumbar crónico, y conducen a mejoras en una amplia gama de variables cognitivas, conductuales y físicas.
En una revisión sistemática, van Tulder y cols. encontraron evidencia suficiente de que el tratamiento con ejercicios fue más eficaz que el reposo para pacientes con dolor lumbar crónico. Sin embargo, los tratamientos conservadores tienen un efecto de bajo a moderado sobre dolor lumbar crónico.
El tratamiento quirúrgico del dolor lumbar crónico se suele reservar para aquellos pacientes con dolor que no ha tenido éxito con las opciones conservadoras.
En las últimas dos décadas, el uso de la cirugía para el tratamiento de dolor lumbar crónico ha aumentado considerablemente. La fusión quirúrgica es un tratamiento importante para el dolor lumbar crónico y se utiliza para reducir el dolor y disminuir la discapacidad en estos pacientes. Sin embargo, no es perfecta, y pueden surgir complicaciones quirúrgicas, incluyendo fuga de líquido cefalorraquídeo, infección de la herida, lesión de la raíz nerviosa, hematoma epidural, aracnoiditis, pseudomeningocele, etc.
Aún no existen guías de práctica clínica claramente definidas relacionadas con la intervención quirúrgica para el dolor lumbar crónico en ausencia de problemas estructurales graves tales como inestabilidad, estenosis espinal, espondilolisis, infección o neoplasia. También hay una falta de pruebas de alta calidad en relación con el tratamiento dolor lumbar crónico.
El siguiente VIDEOpaper analiza la eficacia y la seguridad del tratamiento quirúrgico versus no quirúrgico en pacientes con dolor lumbar crónico.